Es decir, recibir la indemnización o prestaciones contratadas. Más detalles de este tema, en la siguiente nota.
Su cálculo depende de varios factores; entre ellos, el riesgo, la cobertura contratada, el tiempo del contrato, entre otros y corresponde a una fórmula matemática en la que se incluyen impuestos.
Pago único: Un solo desembolso antes de que la póliza entre en vigencia.
Periódica: incluye la programación de cuotas regulares durante el tiempo que dure la cobertura.
Fraccionada: se hace efectiva cuando una prima anual se amortiza en varios pagos mensuales o trimestrales
Natural ascendente: se recalcula el valor y se eleva de modo progresivo.
Esta puede distribuirse en una entrega de dinero o en varias. Y, en ambos casos, requiere de un contrato. Además, el valor de la prima cambia de acuerdo con el límite de indemnización pactado e influye según el riesgo que cubrirá. ¿Qué quiere decir esto? Que la empresa debe estar al tanto de los costos que tendrá si ocurre un siniestro.
Podrías perder la cobertura; sin embargo, esta medida se puede evitar si el asegurado negocia la deuda. Además, en casos extremos de no pago, la aseguradora puede terminar el contrato y no se responsabilizará en caso de ocurrir algún siniestro.
Recuerda que para mejorar tu economía personal es fundamental que estés informado. ¡No dejes de leer Finanzas En Simple!